¿Cuáles son las características de los cobots que harán que tengan un peso especial en la industria 5.0?
1. Versatilidad
La producción de tiradas de productos cada vez más cortas que se adapten a los gustos cambiantes de los consumidores es algo que pueden satisfacer los cobots gracias a su gran versatilidad.
Pero, ¿qué ocurre con la personalización?, ¿puede atender demandas personalizadas? La respuesta es sí. Un cobot puede programarse para una sola tarea, y una vez finalizada reprogramarse de forma sencilla para hacer otra diferente. De esta manera no se necesitan robots diferentes para elaborar productos distintos, y esta es una gran ventaja.
2. Costes y retorno de la inversión
La personalización, la creatividad y el toque humano añadido a la fabricación suponen indudablemente un incremento del coste de los productos, que el consumidor que los demanda está dispuesto a pagar porque valora que sea algo especial y único.
Sin embargo, con un robot colaborativo no tendrá que hacer inversiones estratosféricas en tecnología para desarrollar este tipo de productos, ya que cuentan con un retorno de la inversión de menos de un año, lo que hace que sean accesibles incluso para pequeñas empresas.
3. Colaboración
La robótica colaborativa, lejos de sustituir a los trabajadores en los procesos de automatización en la industria 5.0, mejorará gracias a su característica de colaboración el diseño y la personalización humana. Así, los cobots aportarán velocidad, exactitud y la precisión necesarias para fabricar productos modernos a la par que artesanales.
¿Cómo pueden lograrlo? Con herramientas de vanguardia como son los efectores finales, como por ejemplo aquellos que tienen sentido del tacto, un aspecto clave para alcanzar la máxima precisión, o los más innovadores con destreza humana.