El sentido del tacto en cobots: clave para alcanzar la máxima precisión

La tecnología y la ciencia avanzan a pasos agigantados y, de hecho, la industria 5.0, que pone las personas en el centro de producción, está a punto de llegar. El sector de la robótica es un buen ejemplo de ello y por eso en Universal Robots trabajamos para que nuestros cobots estén siempre a la vanguardia en tecnología, dotándolos de sistemas que permitan mejorar aspectos tan importantes como la precisión o el rendimiento.

Hoy vamos a centrarnos en uno de esos avances, el sentido del tacto en cobots. ¿Cuáles son las ventajas de este novedoso sistema inteligente que pretende fusionar la alta velocidad de la automatización industrial con las habilidades cognitivas?

El sentido del tacto en el cobot, proporcionados por los sensores de fuerza integrados, amplía las capacidades del mismo dentro de la cadena de producción. Esta funcionalidad, permite que los brazos robóticos dispongan de una capacidad similar a la de una mano humana. Esto permite ser más precisos en las tareas automatizadas del proceso de fabricación que requieren una total exactitud en la ejecución.

Características de los sensores de fuerza

Los cobots equipados con sensores de fuerza son capaces de percibir la menor resistencia o presión, por lo que pueden adaptar sus movimientos al entorno y en tiempo real. De esta manera, no es necesario por ejemplo reprogramar a un cobot para empaquetar objetos de diferentes dimensiones y pesos, lo que supone una ayuda para aumentar la eficiencia y productividad.

• Máxima precisión: Pero además, si hasta ahora la mano humana era la única de realizar determinadas tareas de precisión, la incorporación del sentido del tacto en cobots hace que la falta de profesionales cualificados no sea un problema, ya que les permite realizar tareas que exigen una máxima exactitud con una precisión total.
• Menor tiempo de integración: otra de las ventajas es que los paquetes de software pre-instalados son muy sencillos y pueden estar listos en pocos minutos. Además, se pueden automatizar varias líneas de producción al mismo tiempo.
• Mayor rendimiento: gracias a la velocidad de inserción de pasadores y registro de trayectoria con modo de velocidad constante la empresa consigue un mayor rendimiento de fabricación.

Soluciones que incorporan sensores con sentido del tacto

Los sensores con sentido del tacto pueden incorporarse a todos los cobots de Universal Robots. Como novedad, la gama e-Series, lanzada recientemente, cuenta con un sensor de fuerza y par integrado. Se trata de un sensor ultrasensible que dota al cobot de capacidad de reacción ante el más mínimo movimiento y de una máxima precisión.

Cómo añadir sensibilidad táctil a su robot

Pero además, en Universal Robots contamos con una solución de sofware perfecta para añadir fácilmente sensibilidad táctil a su robot: el módulo ArtiMinds RPS Force.

Con movimientos controlados por la fuerza, el robot puede abordar variaciones del proceso en tiempo real mediante la adaptación de su movimiento como un ser humano, en función de las lecturas de un sensor de fuerza y torsión.

La sensibilidad táctil que le otorga este módulo, se convierte en decisivo ante determinadas necesidades específicas de la producción:

• Cuando la posición de las piezas de trabajo varía y no se pueden fijar fácilmente
• Ante materiales deformables
• Piezas de trabajo que pueden ver alteradas su geometría o propiedades de su superficie.
• Piezas que necesitan sumo cuidado en la manipulación

• Cuenta con un amplio soporte de hardware.
• Es de fácil configuración.
• Tiene más de 25 plantillas y asistentes que agregan sensibilidad táctil.
• Tiempo de enseñanza reducido gracias al cual se podrá guiar al robot en función de las lecturas del sensor de fuerza par con alta precisión.

Y qué mejor que avalar con un caso de éxito como el de la empresa MARKA, el funcionamiento de máxima precisión de los cobots. El objetivo de MARKA, industria de químicos italiana que produce detergentes, era colocar una tapa en una botella con el nivel de ajuste perfecto. Gracias a la instalación de un robot corporativo que imita el rango de movilidad de un brazo humano han conseguido no solo incremental la calidad general del producto final, sino recuperar los costes de adquisición del cobot en el plazo de un año.